lunes, 20 de agosto de 2012

Hábitos de lectura

Giró el libro y le quitó el precio. Siempre disfrutaba mucho de ese momento en que todo parecía acontecer a cámara lenta e irreductiblemente. Se tumbó y empezó el primer relato. Una semana después, habiéndose acabado el libro, se paró nuevamente ante la sección de aquel autor tan sintético en la librería. Hojeó algún que otro ejemplar prestando más bien poca atención. Se decidió por uno sin seguir ningún criterio y se fue a casa. Aquel le duró tres días, tras los cuales se volvió a encontrar delante del mismo anaquel de la tienda. Se acercó al dueño, le pidió que le recomendara algún autor nada sintético y salió a la calle pensando en la posibilidad de que aquello fuera a cambiar el transcurso de las cosas.

1 comentario:

  1. Muchas veces creamos costumbres sin a penas darnos cuenta.. Unas veces malas.. y otras buenas.. Este texto me ha hecho pararme a reflexionar sobre las mías.. y creo que debo de cambiar alguna.. (jeje)

    Gracias por compartir este pequeño relato..

    ^_^

    Espero que podamos seguir leyéndonos..

    Un besito de fresa con nata! (ñam..)

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